Este
semestre tenía un objetivo principal de autoestudio: prácticar mi comprensión
oral en las variedades chilenas y colombianas. Cuando miré los primeros videos,
me di cuenta de que el habla chileno es bastante difícil de comprender. De
hecho, algunas personas que se presentaron en el material visual, me recordaron
muchísimo a la gente de Andalucía. Durante mi Erasmus en España, necesité unas
semanas para acostumbrarme al lenguaje de los andaluces. En el blog, me
encontré más o menos con la misma situación. Por lo tanto, pensé que comprender
este dialecto me llevaría más tiempo de lo previsto. Con el fin de fascilitar
la comprensión, busqué materiales que relataron temarios bastante relacionados
entre sí: El socialismo chileno, la dictadura chilena y las herencias del
régimen militar en Chile, entre otros. Así que, por falta de tiempo, me dediqué
casi únicamente al acento chileno, dejando aparte el habla de Colombia. Voy a
seguir trabajando este asunto en el próximo semestre.
Las
semejanzas que detectó entre la variedad andaluza y la chilena llamaron mi
atención. De ahí que, en mi entrada: ‘El español chileno’ hice unas
investigaciones sobre el origen de las variedades latinoaméricanas, con un
enfoque en el lenguaje de Chile. Ya mencioné que el
español chileno tiene unas características lingüísticas bastante particulares:
El seseo, la aspiración de los sonidos [s] y [x], y los regionalismos o
indigenismos, entre otros. Además, al nivel de los sociolectos, el habla
chileno consta de una infinidad de modismos y vulgarismos. Fenómenos con los
que me vió enfrentada al leer la novela 'Al Sur de la Alameda' y cuando miré
las películas y documentales chilenos. Por supuesto que no soy experta del habla chileno, pero
aprendí muchísimo. Creo que se podría hacer aún mucho más acerca de los
diferentes registros y las otras variedades geográficas del idioma español.
Respecto
al léxico activo, revisé y aprendí expresiones de los campos lexicales de
gobierno, política y sociedad. Este trabajo me ayudó mucho cuando redacté las
entradas: ‘La dictadura en Chile’, ‘La herencia de la dictadura en Chile’ e
‘¿Independencia para Cataluña? Asimismo, este vocabulario fue muy útil para
comprender los documentales del blog, y, en particular, me sirvió mucho para la
preparación del examen oral. Sinceramente, tengo que admitir que puedo seguir
trabajando en el ámbito lexical.
En
cuanto a las temas de mi blog, intenté elegir asuntos que plantean
controversias en la sociedad española: La tauromaquia, los anhelos
independistas de Cataluña, y, en forma de comentario, el cambio climático.
También incorporé estrategias de debate que introducimos en clase a la hora de
redactar mis textos. En primer lugar busqué informaciones para poder empezar a
escribir una discusión y amplié mi léxico temático. Luego, intenté formular argumentos positivos y
negativos para realizar un cambio de perspectiva, tratando llegar a un
equilibrio argumental, porque no quería que un lado de la cuestión quede menos
fuerte que el otro. Los términos y marcadores que aprendimos en clase me
ayudaron cuando redacté mis textos. Mi comentario argumentativo sobre
el cambio climático es una exepción, puesto que la discusión aborda solamente
contraargumentos. En general, la redacción de textos argumentativos fue un buen
ejercicio para mí, ya que pude mejorar mis competencias analíticas.
Comenté
entradas en otros blogs según dos criterios. Por un lado, decidí comentar
entradas que estaban relacionadas con los temas que traté en mi propio blog.
Por otro lado, quería profundizar un temario a lo que no pudimos dedicarnos
mucho en clase.
Tiempo empleado: 1h
Keine Kommentare:
Kommentar veröffentlichen